Consulta al experto

En primer lugar permitenos hacer una pequeña apreciación respecto al clima. Que sea un clima extremo (o continental severo como el que tenemos en Aranda de Duero), no tiene por qué suponer un factor de riesgo muy elevado siempre que por ejemplo un vidrio que ha pasado la noche a bajo cero, reciba los primeros rayos de sol de la mañana de forma irregular, eso puede provocar roturas por choque térmico, de las que puedes leer más aquí. Ese mismo riesgo ocurre cuando por ejemplo apoyamos una cazuela caliente sobre un cristal: la diferencia de temperatura genera tensiones debido a la dilatación desigual del vidrio provocando finalmente la rotura.

Además, al tratarse de un fin tan funcional como es una mesa, donde la gente se apoya, posa cosas, se caen cubiertos se golpea con platos, etc… nuestra recomendación para un vidrio de esas dimensiones, es sin lugar a dudas un vidrio templado mínimo de 8-10 mm, con el canto pulido.

Hay que tener en consideración cual va a ser la forma de sujeción del vidrio, ya que no es lo mismo que el cristal encaje en un bastidor perimetral, a que apoye por ejemplo en cuatro puntos que coincidan con las patas de las mesas. En este último caso la recomendación iría en la linea de incrementar el espesor.